domingo, septiembre 03, 2006

MANIFIESTO POR UNA COMPRA RESPONSABLE


1º) ¿La compra de productos de otras regiones es, realmente, un boicot? Dadas las connotaciones negativas de la palabra "boicot" (ligada generalmente a otro tipo de actos, violentos y exaltados), resulta más acertado considerarlo como una campaña de "consumo responsable", "compra inteligente", o "compra solidaria" con todas las regiones de España. Por cuanto el IVA y los demás impuestos generados por esas industrias no catalanas, van a revertir sobre todos los españoles de manera igualitaria. El consumidor tiene perfecto derecho legal y moral a comprar con su dinero lo que desee; a elegir libremente los productos en función de su procedencia, o de cualquier otra consideración como precio, calidad, atractivo de la etiqueta, resistencia del envase, color, etc.

2º) ¿Traerá la Campaña efectos adversos sobre toda España? No, esto es una intoxicación. Prácticamente cualquier artículo elaborado en Cataluña tiene equivalentes de otras marcas realizados en el resto de España. Como el nivel de consumo de cada familia se mantiene igual, los vendedores de materias primas continuarán manufacturando la misma cantidad, sólo que a otras regiones. Según las leyes naturales de la economía, la cuota de mercado que una empresa pierde, la cubre inmediatamente otra. No se destruye la industria, sólo se equilibra geográficamente la producción y se redistribuye la riqueza. La prueba está en que ningún sector económico de fuera de Cataluña ha protestado, y muchos están creciendo y creando empleo. A las compañías siempre les queda la posibilidad de domiciliarse fiscalmente fuera de Cataluña para que sus impuestos beneficien a todos.

3º) ¿Quién inició el boicot? Los nacionalistas catalanes. La Generalidad lleva años financiando campañas en prensa, radio, televisión e internet para que sus ciudadanos compren productos de Cataluña y desechen los no fabricados allí. El paso más reciente ha consistido en acuñar la denominación de origen "CAT" en las etiquetas, para una más fácil y rápida identificación de "sus" productos en las estanterías de los comercios. Promueven la consigna de "Vender a todos, pero comprar sólo lo nuestro".

4º) ¿Es de temer un boicot cruzado? No. Cataluña vende al resto de España más del 70% de lo que produce, mientras que apenas le compra el equivalente al 5% del PIB. Por lo que, un boicot catalán (sumado al que ya de por sí vienen realizando desde hace años), tendría repercusiones inapreciables. Prueba de ello es que únicamente políticos y entidades catalanas han expresado su malestar por la Campaña de Consumo Responsable que están sufriendo.

5º) ¿Son mejores los productos catalanes que los del resto de España? No necesariamente. Podemos encontrar miles de artículos a un precio más barato, y con idéntica o superior calidad elaborados en el resto de España. Dentro del cava, por ejemplo, un sector aparentemente dominado por la industria catalana, el galardón como Mejor Cava del Año lo ostenta un excelente vino espumoso valenciano: Torre Oria.
6º) ¿Es el nuevo Estatuto sólo un mero acuerdo de financiación más justo para Cataluña? No. Propone un acuerdo de financiación terriblemente injusto para las demás regiones de España, que quedarían relegadas a un segundo plano, e inmersas en graves deficiencias de financiación pública. Pero, además, pretende apropiarse de competencias emanadas de la soberanía de todos los españoles, como son: creación de una Administración de Justicia propia e independiente de la española; una Hacienda propia; derecho de veto en Política Exterior; supresión de las Delegaciones y Subdelegaciones del Gobierno de España; imposibilidad de acceso de cualquier español cualificado a determinadas profesiones (funcionarios, profesores, catedráticos, registradores, jueces, notarios, etc.); cambio de la titularidad de puertos y aeropuertos, que pasarían a ser de la Generalidad; blindaje del agua del Ebro;... y otras muchas. Además de definir a Cataluña como "nación". Supone, en realidad, una independencia de hecho.

7º) ¿El nuevo estatuto contentaría definitivamente al nacionalismo catalán? No. El dirigente de ERC, Carod-Rovira, ya ha declarado a la prensa que, su aprobación, sería sólo un paso más hacia la independencia total de España. Y que no se piensan detener ahí. Consta, además, en el irrenunciable ideario nacionalista, la anexión de otros territorios -como Valencia y Baleares- para terminar de conformar su pretendido mapa de "Los Païssos Catalans".

8º) ¿Es La Caixa sólo una entidad bancaria? Tras las últimas informaciones reveladas (OPA a Endesa, condonación de deudas a partidos políticos, favores del Tripartito, etc.), cabe pensar que juega un importantísimo papel como ariete económico del nacionalismo catalán en España, para penetrar su industria y lograr un mercado cautivo de españoles que sufraguen el independentismo en el futuro.

9º) ¿Va la campaña dirigida contra Cataluña? No, los responsables del desaguisado son sus líderes políticos; que, dentro de una concepción caciquil del Poder, están sumiendo a la región en un aldeanismo autocomplaciente y retrógrado. Son precisamente ellos quienes menos derecho tienen a protestar por la "Campaña de Consumo Solidario", que supone empezar a aplicarles en el área económica su ansiada independencia. Los países tienden a proteger sus propios mercados frente a la producción extranjera. Una campaña bien hecha sería sólo un pálido anticipo de lo que Cataluña debería afrontar industrialmente tras su secesión. Y, con efectos inmediatos, la Campaña remediará la presunta desigualdad tributaria de la que tanto se quejan los nacionalistas.

10º) ¿Qué pueden hacer los ciudadanos y empresarios de Cataluña? El Estatuto ha sido aprobado por un aplastante 89,9% de los representantes políticos en el Parlamento catalán. Y éstos, que tan hostil y mezquina imagen están ofreciendo de Cataluña, han sido elegidos por el Pueblo catalán. Su electorado tiene la posibilidad de manifestar públicamente su parecer u oposición sobre tan injusta reforma estatutaria.